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LilasLa lila es un arbusto de flores perfumadas poco exigentes y notables por su vigor y longevidad. Es una flor perfecta tanto para la disposición de grandes, como de pequeños jardines. Además, los numerosos cultivares permiten escalonar los períodos de florescencia. La lila o Syringa pertenece a la familia de las Oleáceas. Esta familia botánica comprende plantas de una gran importancia agrícola, silvícola y hortícola. Se conocen aproximadamente una veintena de especies naturales e híbridas de las Lilas. Las especies naturales provienen en su mayor parte del sudeste de Europa y del este del Asia, más particularmente de China. Arbusto de tamaño variable según la especie, la Lila presenta una gama variada de colores y de forma de las flores.
CUIDADOS La época ideal para la plantación es la primavera: abril y en mayo. El arbusto puede entonces echar raíces y acumular bastantes reservas nutritivas antes de principios del invierno. La plantación de las lilas debe efectuarse en un suelo con buen drenaje y de un pH neutro a ligeramente alcalino. Los suelos muy arcillosos primeramente deben ser combinados con abonos compuestos y tierra arenosa. Después de la plantación, incorpora a la tierra materia orgánica en forma de abono compuesto o estiércol bien descompuesto. Si el drenaje es deficiente, planta las lilas sobre un cerrillo levantado de 30 a 50 cm de altura en un hoyo bastante ancho. La anchura del agujero de plantación debería corresponder a dos veces la anchura del terrón. Para obtener una florescencia abundante, escoge un lugar de plantación soleado. Además, fertiliza con estiércol rico en fósforo y en potasio a principios de mayo. Evita los estiércoles ricos en nitrógeno ya que inducen a la formación de un follaje abundante, en detrimento de las flores. Los primeros años debemos talar nada más entrar la primavera y antes del desarrollo de las yemas, abril, o con la caída de las hojas en otoño, septiembre-octubre. Posteriormente, talaremos justo después de la florescencia.
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